Publicado: noviembre 2017
Un deducible es una característica clave de muchos tipos de cobertura de seguro. Es la cantidad de dinero que pagas de tu propio bolsillo en un reclamo cubierto. Generalmente encontrarás deducibles para ciertas coberturas en pólizas de seguro de casa, inquilinos y auto.
Una póliza puede tener múltiples deducibles. Por ejemplo, si tu póliza de seguro de auto tiene cobertura para todo riesgo y cobertura de colisión, es probable que tengas un deducible para todo riesgo y un deducible por colisión separado.
Digamos que la cobertura de colisión en tu póliza de seguro de auto tiene un deducible de $500. Tu auto resulta dañado en un accidente cubierto; costará $3,000 para repararlo. Tú pagarás $500 por reparaciones y tu póliza cubrirá los $2.500 restantes.
A diferencia del seguro de salud, en el que sueles tener que pagar un deducible por año calendario, el deducible de una cobertura de la póliza de seguro de auto o de propietario se aplicará cada vez que presentes un reclamo.
Las aseguradoras ofrecen una gama de deducibles y normalmente puedes elegir el deducible que se adapte mejor a tus necesidades. De acuerdo con el Insurance Information Institute* (III, por sus siglas en inglés), las cantidades comunes de deducible para las coberturas de seguro de casa y auto son de $500 y $1,000 - pero las cantidades varían entre los aseguradores y las pólizas.
Tu deducible normalmente afecta tu prima, el costo que pagas por tu póliza. Cuanto mayor sea tu deducible, menor puede ser tu prima. Esto se debe a que, con un deducible más alto, estás asumiendo una mayor responsabilidad por los gastos de un reclamo.
Un agente local* puede ayudarte a encontrar el equilibrio correcto entre deducibles y costos de prima para tu presupuesto.
Para un ejemplo simple de cómo funciona un deducible, mira este video: