5 cosas que debes saber sobre el seguro social
Publicado: agosto 2017
Cuando se trata de algo tan importante como tu seguridad social, es bueno saber que estás obteniendo lo que más puedes. A continuación te compartimos cinco cosas que debes recordar:
Puedes comenzar a recibir los pagos del seguro social tan pronto como cumplas 62, pero los beneficios pueden reducirse de 20 a 30 por ciento, de acuerdo a la Administración del Seguro Social de Estados Unidos (SSA por sus siglas en inglés). Eso es mucho, sobre todo si esperas pasar muchos años jubilado. Quizá quieras pensar en trabajar más tiempo o depender de tus ahorros de jubilación para ayudarte a cubrir tus costos de vida hasta que puedas recibir los beneficios completos.
La siguiente gráfica del SSA enumera la edad de jubilación para obtener los beneficios de seguridad social completos.
Mientras tengas como mínimo 62 años, podrás acceder a la opción de tener seguridad social, dice la SSA. La SSA* fija los límites anuales de ingresos. Si estás recibiendo beneficios de seguridad social antes de tener la edad completa de jubilación y tus ganancias están por encima del límite, tus pagos se reducirán temporalmente en función a cuanto ganes. Digamos que ganas $10,000 sobre el límite. Tus beneficios se reducirán en $5,000. Si ganas $20,000 sobre el límite, se reducirán en $10,000.
La buena noticia es que no pierdes tus beneficios de manera permanente si se reducen. En lugar de eso, la cantidad de los pagos se recalcula para que puedas recibir el dinero retenido una vez que hayas alcanzado la edad completa para jubilarte, de acuerdo a la SSA*. Es otra manera en que trabajar durante tu jubilación con el tiempo puede ayudarte a extender tus ingresos.
Cuando estés listo para comenzar a recibir tus beneficios mensuales, debes solicitarlos a la SSA. Puedes hacerlo por teléfono (1-800-772-1213), en persona o con la aplicación en línea* de la SSA.
Algunos beneficiarios de la seguridad social terminan pagando impuestos por sus beneficios, de acuerdo a la SSA. Todo depende de los ingresos enumerados en tu declaración de impuestos. Si declaras más de $25,000 por persona (o $32,000 en conjunto), tendrás que pagar impuestos federales sobre tus beneficios, de acuerdo con la SSA*. Las reglas para los impuestos estatales varían en cada estado.
Digamos que tus beneficios mensuales resultan mayores que los de tu cónyuge. Es un escenario común, especialmente en las familias en donde el cónyuge hizo una pausa en su carrera para quedarse en casa con los niños. En casos como este, la SSA* menciona que tu cónyuge puede ser elegible para obtener beneficios adicionales - hasta la mitad del monto total de tu jubilación.
Después de que fallezcas, tu cónyuge va a recibir un cheque de beneficios mensuales, que puede ser el tuyo o el suyo, considerando el que sea mayor. Si tienes niños con alguna discapacidad, hijos menores de 19 años o padres ancianos que dependen de ti para al menos la mitad de sus ingresos, podrían recibir “beneficios de sobreviviente”, de acuerdo a la SSA*.